
Patrono de artesanos; orfebres; joyeros; relojeros; herreros; cerrajeros; talabarteros; jinetes; taxistas; carreteros; coleccionistas de monedas; trabajadores agrícolas; campesinos; peones; trabajadores de estaciones de servicios; mineros; veterinarios; caballos.
Eloy (o Eligio, que es lo mismo) significa: "el elegido, el preferido".San Eloy fue el más famoso orfebre de Francia en el siglo VII (orfebre es el que labra objetos de plata u oro).

Cuando ya aprendió bien el arte de la orfebrería se fue a París y se hizo amigo del tesorero del rey. Clotario II le encomendó a Eloy que le fabricara un trono adornado con oro y piedras preciosas. Pero con el material recibido el joven artista hizo dos hermosos tronos. El rey quedó admirado de la honradez, de la inteligencia, la habilidad y las otras cualidades de Eloy y lo nombró jefe de la casa de moneda (todavía se conservan monedas de ese tiempo que llevan su nombre).

Eloy se propuso no dejarse llevar por las costumbres materialistas y mundanas de la corte. Y así, aunque vestía muy bien, como alto empleado, sin embargo era muy mortificado en el mirar, comer y hablar. Y era tan generoso con los necesitados que cuando alguien preguntaba: "¿Dónde vive Eloy?", le respondían: "siga por esta calle, y donde vea una casa rodeada por una muchedumbre de pobres, ahí vive Eloy".

Un día Clotario le pidió a nuestro santo que como todos los demás empleados jurara fidelidad al rey. Él se negaba porque había leído que Cristo recomendaba: "No juren por nada". Y además tenía miedo de que de pronto al monarca se le antojara mandarle cosas que fueran contra su conciencia. Al principio el rey se disgustó, pero luego se dio cuenta de que un hombre que tenía una conciencia tan delicada no necesitaba hacer juramentos para portarse bien.
Eloy se propuso ayudar a cuanto esclavo pudiera. Y con el dinero que conseguía pagaba para que les concedieran libertad. Varios de ellos permanecieron ayudándole a él durante toda su vida porque los trataba como un bondadoso padre.



Oración.

y alentaste a Noé para que fuera el primer coleccionista
ayudándote así a salvar y glorificar parte de tu creación;
haz de nuestra colección numismática un instrumento
para preservar y admirar el trabajo del hombre,
la inspiración del artista y la belleza de los materiales que creaste.
Danos la sabiduría y la paciencia para compartir lo poco que sabemos,
la sensibilidad del buen samaritano para ayudar al que lo necesite
y la sagacidad del administrador para invertir en el tesoro verdadero.
Ayúdanos a vencer nuestra avaricia con la generosidad de la viuda pobre
para entregar hasta nuestras dos últimas monedas; y así, libres,
esforzarnos en encontrar la dracma de tu voluntad.
No permitas que te traicionemos por algunas monedas, antes bien, haz;
que al igual que tu siervo San Eligio, dupliquemos los talentos
que nos distes para gozosos recibir el denario de tu justicia.
Preserva nuestra colección para las futuras generaciones;
al igual que nuestra alma, cúbrela con la patina de tu protección
y enséñanos el camino al lugar donde ni el ladrón llega ni el moho corroe.
Amén.
Fuentes:
Iluminación Divina
Santoral Católico
Ángel Corbalán
Querido amigo Ángel, pues si que es Patrono de currantes, mas de quince profesiones.....
ResponderEliminarJulio Cesar Rodriguez