"... perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden;..."
EL PERDON
Desde hace algunos años, he venido escribiendo artículos de reflexión y sobre todo, de experiencias personales.
Para mi, ha sido un ejercicio continuo de auto-conocimiento y de gran ayuda, dados los eventos y sucesos que he vivido en esos años.
Por eso, me animo a escribir sobre un tema que tanto ha tenido que ver en mi vida y en las experiencias del día a día. Y este no es otro que el perdón
Buen tema este, periódicamente cuando rezamos el Padre nuestro, pedimos perdón “a Dios nuestro padre como así perdonamos a los que nos ofenden”…..
En ocasiones, minutos después, ya no nos acordamos…
Entiendo que el perdón es una expresión de amor.
El perdón, nos libera de ataduras que nos amargan el alma y enferman el cuerpo, y lo sé por experiencia.
No significa que estés de acuerdo con lo que pasó. Ni que lo apruebes.
Perdonar no significa dejar de darle importancia a lo que sucedió, ni darle la razón a alguien que te lastimó. Simplemente significa dejar de lado aquellos pensamientos negativos que nos causan dolor o enojo.
Una persona que viva con rencor, vive con una gran carga y que le impide estar libre y moverse hacia sus objetivos.
Para ello, es importante ser humilde. Es necesario eliminar el orgullo que actúa como una barrera antes de ceder el perdón.
El perdón es incondicional, no lo ganamos, no lo merecemos y no podemos negociar con él, el perdón no está basado en la promesa de no volver a hacerlo, ofrecemos perdón a alguien así sea que esa persona lo pida o no.
Cuando alguien dice “te perdono si…” Eso no es perdón, es negociar, cuando Jesús extendió sus manos en la cruz El dijo: “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen (Lucas 23:34)”, El tomó la iniciativa, no esperó a que nosotros estuviéramos limpios primero.
El perdón no minimiza la ofensa
Se desvaloriza el perdón, cuando alguien te pide perdón y tu dices “no es gran cosa, está bien, en realidad no me molestó…”,…… si no fue “la gran cosa”, no necesitas perdón y no necesitas ofrecerlo; Si realmente necesita perdón entonces no debemos minimizarlo cuando alguien te pide perdón.
El perdón no significa que la relación continúa sin ningún cambio.
La Biblia nos enseña tres cosas que son esenciales para continuar una relación que ha sido rota: arrepentimiento, restitución y reconstrucción de la confianza.
Debe estar genuinamente arrepentido y verdaderamente triste acerca de lo que hizo, no es tan solo decir un rápido “lo siento”, quiere decir que debes decir verdaderamente de corazón y con significado “lo siento, yo estaba equivocado, por favor perdóname”
Ocasionalmente el perdón debe venir acompañado con algún tipo de restitución. En caso de un daño material, si yo vengo a tu casa y la incendio, no es suficiente con decir “lo siento” yo debo asumir el costo de haber destruido tu casa.
Cuando se trata de reconstruir la confianza, puede tomar un largo tiempo. El perdón es instantáneo, pero la confianza es algo que solo se reconstruye en un periodo de tiempo, debe ser vuelta a ganar.
El perdón no es olvidar lo que ha pasado
Ustedes habrán escuchado esta frase una y otra vez “perdona y olvida”, Hay solo un problema con ello, es realmente difícil olvidar una herida causada en tu vida, es como cuando haces dieta, piensas en comida todo el tiempo, piensas más en ello que cuando no estabas haciendo dieta, la única forma de olvidar algo, es realmente enfocarte en algo más.
Y en este caso, yo me acuerdo del “Padre nuestro”…
Ángel Corbalán
Me ha hecho mucho bien leer tus reflexiones, muchas gracias. Espero poder ponerlas en práctica!!
ResponderEliminarMuchas gracias amigo o amiga.
ResponderEliminarYa somos dos y confio, que pronto seamos miles y se convierta en algo natural..................el perdonar...Y por supuesto, pedir de una manera real y de corazón....................perdón!!!
Feliz Navidad y que Dios te ilumine!